Sánchez miente: culpa de la subida de la inflación a Ucrania cuando llegó al 7,6% antes de la guerra
«España ha rebajado la inflación por debajo del 2%, la controlamos como ninguna otra economía de la Unión Europea», ha afirmado Pedro Sánchez, en su primer y único cara a cara con el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo. El todavía jefe del Ejecutivo ha ligado la espiral inflacionista a la guerra de Ucrania cuando, durante los doce meses previos al conflicto bélico, el Índice de Precios de Consumo (IPC) fue del 7,6% (según el Instituto Nacional de Estadística), por tanto; más del triple del porcentaje señalado por el líder socialista.
Esta ha sido la primera mentira del jefe del Ejecutivo durante el debate celebrado este lunes en los platós de Atresmedia. El presidente ha abierto el primer bloque económico del encuentro con un balance positivo tanto del «empleo» como del «crecimiento económico» y la «inflación», con el objeto de revalidar la Presidencia del Gobierno a partir del próximo 23J.
«¿Se da cuenta de que Feijóo no habla nunca de los efectos lesivos de Ucrania, tanto en España como en Europa?», ha preguntado Sánchez al presidente del PP. Una circunstancia bélica que hizo «que en julio de 2022 tuviéramos inflaciones» en los países europeos «por encima del 10%». Con este argumento, el presidente del Gobierno ha intentado justificar la imparable inflación que sufren los españoles. Sin embargo, como demuestran los datos oficiales, el IPC aumentó con Sánchez antes de Ucrania más que después.
De hecho, al igual que su ministra Nadia Calviño, el presidente ha recordado en varias intervenciones durante el encuentro que la inflación española se sitúa por debajo del 2% – el objetivo previsto por la Unión Europea, pero lo cierto es que el IPC está previsto que se acelere desde este mismo mes de julio e incluso llegue al 5% a final de año.
Segunda mentira: el empleo
«Tenemos 21 millones de empleados, 5 millones más que hace 5 años», ha asegurado el presidente. «Hemos multiplicado empleo por 4 en circunstancias adversas (en referencia a la guerra de Ucrania)». Ante tal afirmación, el líder de la oposición ha replicado que más de 430.000 son fijos discontinuos» y ha lanzado un compromiso a la ciudadanía si llega al Gobierno de la Nación el próximo 23J: «Les diré a los españoles cuántas personas están buscando empleo y figuran como empleadas».
Tercera: viviendas de la SAREB
Dentro del bloque económico, Feijóo ha reprochado a Sánchez no haber construido ninguna de las viviendas prometidas a través de la Sareb, la sociedad de la que el Estado es el accionista mayoritario, a través del FROB, el Fondo de Reestructuración Bancaria que se creó para salvar los muebles del sector financiero español tras estallar la crisis de 2008: «Ni 23.000, ni 100.000, ni 40.000, ni 23.000, no ha hecho ninguna (vivienda)».
Una acusación a la que el presidente ha contestado: «Las estamos haciendo, estamos ejecutando 183.000 (viviendas) a través de la Sareb». Lo cierto es que de las 50.000 viviendas últimas que prometió el líder socialista, sólo 9.000 están disponibles y no se espera la ejecución del resto, al menos, hasta la próxima legislatura. De hecho, del total prometido por Sánchez, el 80% de los terrenos y dos de cada tres casas se encuentran sitas en zonas con baja demanda, es decir; en lugares donde los españoles no tienen problemas para comprar o alquilar.
Cuarta: ayudas a las hipotecas
Y de nuevo, lo ha vuelto a hacer. El jefe del Ejecutivo ha vuelto a prometer una ampliación del acceso a las medidas de alivio hipotecario a rentas de hasta 37.800 euros. Unas medidas que ya se adoptaron en noviembre del año pasado con el objetivo de llegar a un millón de familias, pero que según los datos provisionales del periodo del pasado enero a mayo, tan sólo se han registrado 33.000 solicitudes.
Quinta: bajada de impuestos
El presidente también ha aprovechado su intervención para recordar que su Gobierno de coalición acometió una «rebaja del IRPF (Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas) a las rentas inferiores a los 21.000 euros (brutos anuales)», a lo que el líder de los populares ha replicado: «¿Una persona que cobra 30.000 euros (anuales) es rico?».
Lo cierto es que Pedro Sánchez no ha ayudado a los españoles deflactando al tarifa estatal del IRPF que bien hubiera aliviado la presión fiscal que sufren las familias más humildes. Una propuesta que sin embargo sí proponen tanto el PP como Vox, en caso de llegar a Moncloa.